lunes, 23 de julio de 2012

18 de Marzo

Después de esta carta, no volveré a mencionar aquel 18 de marzo y, como tú dijiste, será como si aquella conversación no la hubiésemos tenido.

Llevo dándole vueltas a la cabeza desde ese día, no porque esté buscando otras opciones, sino intentando asimilar algunas cosas. En estos últimos días, he tenido una sobrecarga de información, y no sólo por lo nuestro. Me he acordado mucho de cómo nos conocimos, en diciembre de 2001 y, unos días después, el día 8, pasó algo que cambió nuestras vidas, al menos un poco. Yo recibí la ilusión de volver a empezar pero no puedo hablar sobre lo que sentiste tú. También se me han venido a la cabeza aquellos días cuando me recogías a la salida del instituto y estábamos juntos unos minutos; recuerdo nuestro primer beso y cuando me dijiste que no tenía que besarte en la forma que lo hice el primer día sólo porque los mayores besaran así. No me he desecho de tus cartas, aún las conservo guardadas en una cajita y las leo de vez en cuando. Tampoco he olvidado aquella película que íbamos a ver y que no veremos nunca.

¿Recuerdas mi libro blanco? Ya no existe, lo hice para ti, pero si no lo escribías tú, no lo quería. Recuerdo que me decías que el animal que me representaba era el delfín: bonita e inteligente. Me hiciste sentir muy especial aquel tiempo, y es algo por lo que siempre te estaré agradecida, sin embargo, pienso que que yo no te hice sentir así, que no conseguí que fueras feliz conmigo.

Recuerdo también que el día en que más tiempo pasamos juntos fue el de las notas, en el parque, sentados en un banco del Valle-Inclán, para mí fue muy especial. Por si se te ha pasado por la cabeza, nunca pensé que fueras un cobarde por tu carta de adiós, quizá fue mejor tener algo palpable para recordar que se acabó.

Esta carta que te escribo está llena de dudas, lo sé, y añadiendo una más: no sé qué quiero hacer, aunque parece que tú ya has escogido y no sé si es lo que realmente quieres, o lo que nos conviene. La próxima vez pensaré mejor las cosas antes de contestar nada, al igual que he pensado mucho lo que te digo en esta carta.

En el tiempo que hace que no hablamos, he aprendido bastantes cosas, como que el tiempo no hace olvidarlo todo, o que las palabras tienen mucho poder, y eso implica la capacidad de hacer daño. Espero no haberte hecho daño con mis palabras, sobre todo con las que dije sin pensar.

Sé que no sirve de nada lamentarse, ahora no, pero me hubiera gustado que las cosas hubiesen sido de otro modo, que yo no hubiera sido tan cría hace cuatro años y tres meses, puede que así hubieras seguido conmigo, o quizá habría conseguido llenarte más, como tú hiciste conmigo. Ahora me pongo a pensar y me doy cuenta de que no aporté nada para intentar hacerte feliz. No sé dónde estuvo el error, no sé si realmente fue la diferencia de edad que nos separaba en aquel momento, o es algo que tenías dentro de ti. Pienso que más bien sentías miedo porque yo era muy "pequeña", quizá demasiado inocente. A veces creo que pensaste que si estaba contigo, me sentiría obligada a hacer determinadas cosas para las que, seguramente, no estaba preparada, solo porque a tu edad eran normales. Puede que por eso se acabara todo tan pronto, antes de que fuera más doloroso.

Sinceramente, opino que ha sido bastante egoísta por tu parte haber decidido lo que pasaría conmigo, no haberme dejado tomar parte en algo que me afectaba directamente, deberías haberme dado un voto de confianza y decirme lo que realmente había, lo que de verdad estaba pasando, imagino que es consecuencia de tu actitud protectora. Siempre cuidaste de mí. Puede que te duela lo que voy a decirte, y es que aún te quiero. No quiero ponerte las cosas difíciles, ni a mí tampoco, pero es lo que siento. Tú has decidido alejarte lo justo para no sufrir, para que nadie lo pase mal, y yo no puedo interferir en tu decisión si es lo que realmente quieres. Sería muy fácil hacer como si nada hubiera pasado, pero las cosas no son así. Por otra parte, me pongo a pensar y sé por qué no me dijiste nada de que te habría gustado volver a intentarlo conmigo, era la única forma de saber si podría haber de nuevo un "nosotros", si no volvía a salir con nadie y te esperaba, pero eso no es justo.

Valoro tu amistad sobre todas las cosas, con esto, quiero decirte que quiero que sigamos siendo amigos pase lo que pase, que puedes contar conmigo para lo que quieras y necesites, sabes que puedes hablar conmigo de lo que sea, que estaré a un toque de móvil para lo que te haga falta, creo que sabes que puedes confiar en mí, que lo que me cuentes sólo será tuyo y mío. Nunca te alejes demasiado de mi vida, por favor, si fuera por mí, te pediría que ni siquiera dieras un paso atrás, que al menos, estés a mi lado, oculto. Siempre  que lo precises estaré ahí para escucharte, para hacerte compañía, no sabré aconsejarte, pero podrás desahogarte conmigo. Este párrafo es sólo una excusa para pedirte que, al menos, sigas como hasta ahora, apareciendo de vez en cuando en mi vida y haciéndome sonreír.

No te preocupes por mí, ya sabes que estoy bien. Supongo que ha llegado la hora de despedirme y zanjar el tema. Si se me ha olvidado decirte algo, lo guardaré para siempre dentro de mí. Sólo decirte que me gustaría volver a verte en persona, pero en eso tú tienes la última palabra. En cualquier caso, y pase lo que pase, muchas gracias por todo lo que me has aportado, gracias por haberme dado ilusiones, por haberme hecho reír y sonreír, por haberme dado consejo, por haberme ayudado cuando lo necesité, cuando te lo pedí y cuando no lo hice, gracias porque me hiciste sentir especial y por enseñarme que valgo más de lo que muchas veces pensé, gracias por aparecer en mi vida de improviso, por haber escrito tu dirección de correo electrónico en la mesa de dibujo, gracias por haber permanecido en mi vida después de tantos años.

"Todo en la vida es como el agua. Un flujo incesante de sueños, sentimientos y emociones que vienen y van y, que a su paso, sólo dejan los recuerdos".




2 comentarios:

  1. escribo por equivocacion preciosa con s y aparece este blog
    me gusta y te seguire
    presiosa un saludo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me alegra la equivocación. Muchas gracias por tu comentario, eres la primera persona que escribe. Espero poder leerte. Un saludo

      Eliminar

Me encanta que me escribas, sigue haciéndolo. Gracias =)