miércoles, 10 de octubre de 2012

Ataraxia

Cuando flotas, cuando pierdes el contacto con el suelo y te elevas por encima de las nubes, cuando no puedes esconder esa sonrisa de oreja a oreja, cuando tus ojos brillan con luz propia, sin necesidad de fluorescentes ni sol, cuando no existen miedos, cuando una simple nota con un par de palabras es la mayor de las sorpresas, cuando va a verte sin avisar y es lo mejor que podía regalarte, cuando recuerdas algún momento vivido en el lugar menos adecuado y tienes que reprimir una sonrisa, una risa, disimular al fin y al cabo, cuando no hace falta que sea un día especial para sentirte única, cuando te ríes con ganas, a carcajadas, cuando sientes nervios al saber que vas a ver a esa persona, cuando cada día es diferente, más especial y mejor que el anterior, cuando olvidas todos los problemas con una sonrisa suya, con una mirada cómplice, cuando un simple roce del meñique es mejor que cualquier otra caricia, cuando no hace falta caminar de la mano, cuando no hace falta que sonrías con la boca porque lo haces con la mirada, cuando no necesitas más de lo que te da, cuando te basta saber que está pensando en ti aunque no esté contigo, cuando te importan su bienestar y felicidad más que los tuyos propios, cuando olvidas las preocupaciones, cuando tu malestar desaparece sólo con una palabra de esa persona, cuando haces lo imposible por hacerla feliz, cuando desaparece la ansiedad por no tenerla, cuando la losa que oprimía tu pecho pasa a ser historia, cuando das gracias a la vida por ese día en que vuestros caminos se cruzaron, cuando un simple desayuno, un helado, un café o un almuerzo se convierten en momentos inolvidables, cuando una película o una canción se vuelven especiales porque las conociste a través de ella, cuando cada día es una ilusión nueva, cuando te levantas de la cama y lo primero que haces es pensar en esa persona, cuando no sientes hambre, ni frío, ni miedo, ni sueño al estar con ella, cuando te sientes especial sabiendo que cinco minutos que tenga libres te los va a dedicar a ti, cuando sabes que va a sacar tiempo de donde no lo hay para poder, simplemente, hablar, cuando te paras a pensar el tiempo que deja de dedicarle a otras personas, a otras cosas, por dedicártelo a ti, cuando estás siempre de buen humor, cuando caminas mirando la pantalla del móvil y sonríes a todo el mundo con el que te encuentras, cuando sientes una vibración en tu bolsillo y es ella, diciéndote cualquier tontería y recordándote que está pensando en ti, cuando aflora tu lado más sensible y moña, ese lado que no conocías, que creías olvidado o que tenías escondido por miedo a sufrir, cuando es tu último pensamiento en el día y te vas a la cama sonriendo, cuando no sabes diferenciar el mejor de tus sueños de un día real, cuando te sientes con fuerzas para todo, cuando puedes comerte el mundo, cuando puedes alcanzar el sol, la luna y las estrellas, cuando te das cuenta de que la vida no es tan mala después de todo, cuando simplemente eres feliz...

Los epicúreos, los estoicos y los escépticos lo llamaron ataraxia, quizá Elsa Punset diría que es limerencia, yo creo simplemente que es estar enamorado.

Después de unos cuantos días sin frases célebres, aquí te dejo ésta de Anne de Lenclós: "El amor es más bien el dios de las sensaciones que el dios de los sentimientos".


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